Las pulgas son parásitos casi invisibles que provocan picazón en tu cachorro. Pueden transmitir enfermedades, contagiar una lombriz solitaria o incluso provocar anemia, sobre todo en crías vulnerables. Sin un tratamiento antipulgas adecuado para cachorros, las pulgas pueden infiltrarse en tu casa y picar a las personas.
Las pulgas son difíciles de detectar a simple vista, pero tu cachorro mostrará síntomas como rascarse, morderse y roer la piel. Cuando veas las pulgas, es probable que tengas una infestación total. Si sospechas que tu cachorro alberga huéspedes no deseados, lávalo en la bañera y frota tus manos por el pelaje en busca de "suciedad" de pulgas, puntos oscuros que son en realidad excrementos de pulgas. Deja caer agua del grifo sobre los puntos. Si aparece un color rojo, tienes un problema.
Mitos sobre el tratamiento antipulgas para cachorros
Algunos creen que puede librar a su cachorro de las pulgas dándole de comer cebolla o ajo. Y aunque puede comer estos alimentos, en realidad podrían producirle una reacción tóxica. Además, alimentar a los cachorros con levadura de cerveza o aplicarla sobre la piel no tendrá ningún efecto sobre las pulgas y puede ser perjudicial.
Productos recetados para prevenir las pulgas
Los científicos han desarrollado medicamentos recetados, tanto tópicos como orales, que tu veterinario puede suministrar para evitar que las pulgas piquen y se reproduzcan. Se administran una vez al mes. Los productos tópicos y orales pueden proporcionar un alivio inmediato y prevenir futuros brotes.
Los cuidados preventivos y el tratamiento antipulgas son la mejor manera de garantizar que tu cachorro tenga una vida sana y feliz. Programa las visitas con tu veterinario cuando lo consideres necesario y así tu cachorro tendrá los cuidados que necesita para que se tu mejor amigo de por vida.